La Cuaresma es un tiempo de penitencia, ideal para que elijas buenos propósitos que fortalezcan tu vida espiritual. Una buena opción es el meditación del Rosario, lo cual te permitirá responder al llamado de Nuestra Señora, quién durante sus apariciones pedía frecuentemente que rezáramos el Rosario de manera constante. Esto es lo que la Santísima Virgen pidió a los pastorcitos de Fátima. "¡Recen el Rosario todos los días!"
Por lo tanto, esta oración te ayudará a acercarte a la vida de Jesús y María, y te inspirará con un celo misionero para dar a conocer el rezo del Rosario, animando a quienes te rodean a rezarlo.
La Cuaresma es un camino que te conduce hacia la Pascua. María caminó con Jesús, especialmente en el momento de su pasión, estando al pie de la cruz junto a San Juan. Por ende, durante la Cuaresma, puedes optar por caminar con la Santísima Virgen y permitir que ella te ayude a adentrarte en los días santos que te llevan al día de la resurrección. Puedes hacerlo, rezando los misterios dolorosos del rosario.
Originalmente, el rosario es una oración dedicada a la Virgen María. Al principio se le conoció bajo el nombre de rosario porque implicaba rezar 150 avemarías. Con el tiempo, esta oración fue experimentando una serie de adaptaciones, hasta el año 2002, con la carta apostólica de Juan Pablo II.
Puedes rezar el rosario con la ayuda de los misterios que ofrece la Iglesia.
Hay un día específico para cada serie de misterios.
Tienes la opción de mantener el rezo de los misterios tal como se presentan con los días correspondientes o puedes concentrarte en los misterios dolorosos o rezar los misterios dolorosos durante la Semana Santa.
La agonía de Jesús en Getsemaní, la flagelación, la coronación de espinas, el cargar la cruz y la crucifixión te llevarán a tomar conciencia de lo que ocurre el Viernes Santo.
Puedes rezar el rosario individualmente o en grupos. También, puedes seguir el siguiente paso y comenzar con esta oración y así encomendar una intención de oración. A continuacion, puedes comenzar con:
Después de cada meditación de misterio, rezas una decena del rosario. Comienza con un Padre Nuestro, luego diez Avemarías y termina con un Gloria al Padre.
Al final de cada decena, puedes terminar con la oración de los hijos de Fátima, enseñada por el ángel: "Dios mío, creo, adoro, espero y te amo". Pido perdón por aquellos que no creen, que no adoran, que no esperan y que no te aman. "
Durante la Cuaresma, puedes meditar con diferentes rosarios. Por ejemplo, la Coronilla de la Divina Misericordia, un rosario que te invita a reflexionar sobre la pasión de Cristo, revelada a Santa Faustina. Este rosario se puede rezar los viernes a las 3 pm, en memoria de la muerte de Cristo en el Calvario.
Otro rosario es el de los 7 dolores de la Virgen, que te invita a meditar junto a la Santísima Virgen sobre las distintas etapas de sufrimiento, desde el nacimiento hasta la muerte de su Hijo. Esta oración te ayudará a comprender mejor los diversos dolores de la Virgen, especialmente en el momento de la pasión.
Con Hozana, puedes vivir la Cuaresma uniéndote a una o varias de las comunidades en línea que elijas. Hay para todos los gustos y edades. Por ejemplo: