La oración de los padres es una forma de confiar nuestros hijos a Dios, especialmente cuando han tomado caminos equivocados, son rebeldes o están perdidos en los vicios. Recordemos que, así como rezamos a Santa Mónica por nuestros hijos, también podemos pedir la intercesión de San Benito (a quien a menudo se le reza para librarse de lo negativo) para que los libere y proteja de todo mal, la de San José y la de la Saníisima Virgen María, padres de la Santa Familia, para que envíen su protección divina sobre nuestros hijos y nuestra familia.
Hozana te propone unirte a este hermoso retiro en línea para rezar junto a Santa Mónica por tu hijo en sus dificultades, o por quienes se encuentran pasando una situación difícil…
“En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, con el peso de mi carga de amor, recurro a ti, querida santa Mónica, y solicito tu ayuda e intercesión.
Desde tu lugar en el cielo, te imploro que ruegues ante el Trono del Santísimo por el bien de mi hijo/hija, [Nombre], que se ha desviado de la fe y de todo lo que tratamos de enseñarle.
Sé, querida Mónica, que nuestros hijos no nos pertenecen, sino a Dios, y que Dios a menudo permite esta deriva como parte del viaje hacia Él.
Tu hijo, Agustín, también se descarrió; terminó por encontrar la fe y, desde su fe, se convirtió en un auténtico maestro.
Así que ayúdame a tener paciencia y a creer que todas las cosas —incluso este decepcionante distanciamiento de la fe— obran en última instancia según el buen propósito de Dios.
Por el bien del alma de mi hijo/hija, rezo por entender esto y tener confianza.
Santa Mónica, te ruego me enseñes a ser perseverante en mi fiel oración, como tú misma hiciste por el bien de tu hijo.
Inspírame para comportarme de manera que no aumente la distancia entre mi hijo/hija y Cristo, sino que sólo atraiga a [Nombre] suavemente hacia Su maravillosa luz.
Por favor, muéstrame lo que sabes sobre este doloroso misterio de separación, y cómo se reconcilia en la reorientación de nuestros hijos hacia el paraíso.
Oh, santa Mónica, amante de Cristo y de Su Iglesia, ruega por mí y por mi hijo/hija [Nombre], para que ganemos el cielo y nos unamos allí contigo, en eterna alabanza y agradecimiento a Dios. Amén.”
(fuente: Aleteia)
“A ti recurro por ayuda e instrucciones, Santa Mónica, maravilloso ejemplo de firme oración por los niños.
En tus amorosos brazos yo deposito mi hijo(a) (mencionar aquí los nombres), para que por medio de tu
poderosa intercesión puedan alcanzar una genuina conversión a Cristo Nuestro Señor.
A ti también apelo, madre de las madres, para que pidas a nuestro Señor me conceda el mismo espíritu de
oración incesante que a ti te concedió.
Todo esto te lo pido por medio del mismo Cristo Nuestro Señor. Amén.”
(fuente: Aciprensa)