Todos pasamos por momentos de sufrimiento, que pueden originarse por muchas situaciones: la pérdida de un ser querido, problemas matrimoniales, problemas laborales, una enfermedad, etc. Quizá en esos momentos podemos sentir que todos nuestros planes para el futuro se oscurecen y que no tenemos rumbo, sin embargo, es allí cuando la palabra de Dios nos reconforta y alivia. Por ejemplo, si meditamos en la historia del profeta Elías, podremos ver que cuando estaba pasando por un período de depresión, después de haber sido amenazado de muerte, El Señor vino al lugar donde estaba escondido para darle consuelo y ánimo. Imagínense, si la palabra de un amigo puede darnos fuerza, ¡cuánto más la palabra de Jesús, que nos conoce mejor que nadie!... Por eso, te invitamos a dejarte curar y recibir paz a través de estos cinco preciosos versículos bíblicos.
“El Señor está cerca del que sufre y salva a los que están abatidos.” (Salmos 34:19)
“Porque el justo, aunque caiga siete veces, se levantará, mientras que los malvados se hunden en la desgracia.” (Proverbios 24:16)
“Despreciado, desechado por los hombres, abrumado de dolores y habituado al sufrimiento, como alguien ante quien se aparta el rostro, tan despreciado, que lo tuvimos por nada.” (Isaías 53:3)
“Ellos combatirán contra ti, pero no te derrotarán, porque yo estoy contigo para librarte –oráculo del Señor –.” (Jeremías 1:19)
“Pero él me respondió: «Te basta mi gracia, porque mi poder triunfa en la debilidad». Más bien, me gloriaré de todo corazón en mi debilidad, para que resida en mí el poder de Cristo. Por eso, me complazco en mis debilidades, en los oprobios, en las privaciones, en las persecuciones y en las angustias soportadas por amor de Cristo; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.” (2 Corintios 12:9-10)
“Si cruzas por las aguas, yo estaré contigo, y los ríos no te anegarán; si caminas por el fuego, no te quemarás, y las llamas no te abrasarán.” (Isaías 43:2)
“Nuestra angustia, que es leve y pasajera, nos prepara una gloria eterna, que supera toda medida.” (2 Corintios 4:17)
Sea cual sea el origen del sufrimiento (duelo, enfermedad, separación...), Jesús, quién también sufrió en carne propia, conoce el dolor y quiere liberarnos de él. Por eso, Hozana te invita a entregar tu sufrimiento al Señor con total confianza a través de:
Esta novena al Sagrado Corazón de Jesús, cuyo amor desbordante quiere sanar tus heridas de cualquier índole.
Esta novena de oración a la Virgen de Lourdes, para apoyar a todos nuestros hermanos que se enfrentan al dolor causado por la enfermedad física, mental o espiritual.
Esta novena para vivir el duelo desde la fe, si has perdido un ser querido.
No olvides, ante cualquier adversidad, encomiéndate a la intercesión de Santa Rita con esta hermosa novena, ya que ella experimentó mucho sufrimiento en su vida, y está dispuesta a llevar tus oraciones ante el Señor.