El primer cuadro con la imagen de Jesús Misericordioso, que se conoce en algunos lugares como el cuadro de Vilna (Vilnius), fue pintado en ese lugar, por Eugenio Kazimirowski, en el año de 1934 (1893-1939).
El 22 de febrero de 1931, Jesús se le apareció a la hermana Faustina y le pidió que mandara a hacer una imagen de él. La joven monja tuvo que experimentar la falta de comprensión de sus superiores por primera vez, hasta el momento en el que conoció al Padre Miguel Sopocko en Vilnia (Lituania), luego de ser enviada allí como jardinera, con las Hermanas de la Visitación, en 1933.
Fue precisamente este sacerdote, capellán del convento y confesor de Sor Faustina, quien encontró al pintor para realizar el cuadro. Se trataba de Eugenio Kazimirowski, vecino del padre Sopocko, quien era un estudiante polaco en aquel entonces.
Santa Faustina lo conoció por primera vez el 2 de enero de 1934 en la fiesta del Santísimo Nombre de Jesús y cada semana, durante unos seis meses iba a ver al pintor para darle indicaciones y correcciones sobre el trabajo que estaba realizando.
El cuadro responde precisamente a la petición de Jesús, puesto que se le apareció como Él quería ser pintado.
Cristo le explicó a Santa Faustina el significado de cada detalle: su posición indica que Él se acerca a quien contempla la imagen. La luz más intensa viene del corazón y la luz en la frente indica la presencia del Padre. Su mano derecha bendice y su mano izquierda presenta su corazón abierto, del cual emergen dos rayos de luz. "Los dos rayos significan la Sangre y el Agua", explicó Jesús a Santa Faustina, "El rayo pálido simboliza el Agua que justifica a las almas. El rayo rojo simboliza la Sangre que es la vida de las almas...Ambos rayos brotaron de las entrañas más profundas de Mi misericordia cuando Mi corazón agonizante fue abierto en la cruz por la lanza. Bienaventurado quien viva a la sombra de ellos porque no le alcanzará la justa mano de Dios" (Diario 299).
En el cuadro, se puede notar que Jesús mira hacia abajo. Cristo explica esto: “Mi mirada en esta imagen es igual a la mirada desde la cruz” (Diario, 326)
A pesar de los esfuerzos, la imagen decepcionaba a Sor Faustina, quien preguntó a Jesús: "¿Quién te pintará tan bello como eres?” Entonces escuchó entonces estas palabras: "No en la belleza del color, ni en la del pincel, está la grandeza de esta imagen, sino en Mi gracia” (Diario, 313)"
La inscripción "Jesús en quien confío" es un elemento esencial del cuadro, y Jesús no deja de recordar su importancia a Faustina. De hecho, la confianza es la actitud que Jesús espera para verter los tesoros de su misericordia en el corazón de cada persona.
El cuadro se expuso por primera vez para su veneración pública, gracias al Beato Miguel Sopocko, del 26 al 28 de abril de 1935. Esto sucedió en la Capilla de Nuestra Señora de la Misericordia, en presencia de la Hermana Faustina. A decir verdad, ese día ella estaba muy contenta de ver los pedidos del Señor cumplidos de esta manera, y de escuchar al padre Sopocko dar un sermón sobre la Divina Misericordia; este sería el primero de los muchos que Jesús estaba pidiendo desde hacía algún tiempo. Con respecto a este evento, ella testificó lo siguiente: “Durante tres días la imagen estuvo expuesta al público, y recibió la veneración pública porque había sido colocada en la Puerta de la Aurora, en un ventanal, en lo alto, por eso se la veía desde muy lejos. Durante esos tres días en la Puerta de la aurora fue celebrada con solemnidad la clausura del Jubileo de la Redención del Mundo, el 19 centenario de la Pasión del Salvador. Ahora veo que la obra de la Redención está ligada a la obra de la misericordia que reclama el Señor” (Diario, 89).
Durante el período soviético, la imagen estuvo oculta en Bielorrusia (de 1956 a 1986). En 2005, después de ser restaurada, se colocó en la Iglesia de la Trinidad en Vilnius, lugar donde se encuentra actualmente.
En su Diario, Faustina relata las siguientes promesas de Cristo: "Prometo que el alma que venerare este cuadro no se perderá. Prometo ya aquí en la tierra la victoria sobre los enemigos, y sobre todo, a la hora de la muerte yo la defenderé como a mi gloria." (Diario 47).
Jesús también dijo: "Por medio de esta imagen colmaré a las almas de muchas gracias, por eso quiero que cada alma tenga acceso a ella." (Diario 570).
Jesús ilustró esta imagen: "Ofrezco a los hombres un recipiente con el que han de venir a la Fuente de la misericordia para recoger gracias. Ese recipiente es esta imagen con la inscripción: Jesús, en ti confío.
La segunda imagen que goza de mucha fama en el mundo entero fue pintada en 1943 en Cracovia-Lagiewniki por Adolfo Hyla. Este hombre pintó la imagen para ofrecerla a las Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia, como parte de una promesa pendiente que tenía con Jesús Misericordioso: quería agradecer al Señor por haber salvado a su familia durante la Segunda Guerra Mundial. Para realizar esta magnífica obra, el pintor siguió el modelo del primer cuadro, mientras daba rienda suelta a su inspiración.
El cuadro fue colocado en la Iglesia del Sagrado Corazón de Wroclaw. Posteriormente, el pintor tuvo que hacer una segunda imagen idéntica con las dimensiones originales. De hecho, esta imagen es la que se encuentra actualmente en la capilla de las Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia en Cracovia, lugar donde también se veneran las reliquias de Santa Faustina.
Además, existen otras imágenes de Jesús Misericordioso, todas hechas según el modelo de la primera.
A decir verdad, la propagación del mensaje de Santa Faustina, el hecho que cada vez más se leyeran sus escritos y las acciones llevadas a cabo en todo el mundo para dar a conocer el mensaje de la Divina Misericordia dieron a la imagen la influencia mundial que tiene hoy en día.
De hecho, en internet tú también puedes pedir la imagen de Jesús Misericordioso y la imagen de la Divina Misericordia, con la oración que contiene al respaldo.
Debes saber que la imagen de Jesús Misericordioso es uno de los cinco medios principales que Jesús le dio a Santa Faustina para entrar en su misericordia y recibir sus gracias. Estos medios también incluyen varias devociones como la coronilla a la Divina Misericordia, la Novena a la Divina Misericordia, la Hora de la Misericordia y la Fiesta de la Misericordia.